Cómo “mandar a la mierda de forma educada” en el mundo digital (y por qué es necesario)

En el universo digital, no todo es complacer, responder, “estar disponible” o agradar a todo el mundo. A veces, para proteger tu energía, tu marca, tu enfoque y tus resultados, hay que aprender a decir “basta” con respeto y asertividad. Eso es precisamente lo que plantea Alba Cardalda en su libro Cómo mandar a la mierda de forma educada, y lo que hoy quiero adaptar para emprendedores digitales. 

Este artículo explora cómo poner límites digitales bien puestos —sin agresividad, sin quemarse, sin perder oportunidades— y por qué es una habilidad estratégica indispensable para crecer con salud mental y profesional.


1. ¿Por qué nos cuesta “mandar a la mierda” incluso cuando conviene?

1. ¿Por qué nos cuesta “mandar a la mierda” incluso cuando conviene?

Alba Cardalda identifica que muchas veces retenemos el “no”, la retirada, el límite, por razones como:

  • Miedo al rechazo: pensamos que si no respondemos siempre, nos criticarán o perderemos posiciones.
  • Culpa o autoexigencia: sentimos que debemos ser “perfectos”, siempre disponibles, complacientes.
  • Creencias sociales: la idea de que decir “no” es grosero o muestra debilidad.

En el ámbito digital, esos miedos se amplifican: los mensajes, los comentarios, las opiniones constantes, la presión de responder rápido… Todo empuja a estar activxs y accesibles. Pero no estar cuidando tus fronteras es un camino hacia el agotamiento.


2. El principio: límites como acto de respeto (a ti mismo y a tu audiencia)

2. El principio: límites como acto de respeto (a ti mismo y a tu audiencia)

Decir “hasta aquí” no es agresivo, cuando se hace con asertividad. Es una señal de integridad profesional y personal. Cuando tus límites están claros, ofreces relaciones más sanas (con tu audiencia, tus clientes, tus colaboradores).

Algunas verdades:

  • Tus recursos (tiempo, energía, creatividad) no son infinitos.
  • No todas las oportunidades merecen tu “sí”.
  • Tu negocio digital debe alinearse con tu propósito y valores, no con todo lo que golpea tu puerta.

3. Cómo “mandar a la mierda de forma educada” en tu negocio digital

Aquí tienes pasos prácticos que Ricardo puede compartir con su audiencia:

a) Define tus límites claros (antes de necesitarlos)

  • Horarios de atención: cuándo aceptas mensajes o consultas.
  • Canales cerrados: no tienes que responder a todos los DM, WhatsApp u otras redes.
  • Ofertas seleccionadas: nichos, temas o tipos de clientes que aceptas o no.
  • Temas que no abordarás: delimita lo que no haces (por ejemplo: no trabajo gratis, no diseño gráfico si no es mi especialidad, no gestiono redes si no es mi servicio).

b) Usa lenguaje asertivo y agradecido

Ejemplos de cómo rechazar sin quemar:

“Gracias por pensar en mí para este proyecto, pero en este momento no puedo asumirlo.”
“Aprecio tu interés, pero no tengo disponibilidad para ese tipo de trabajo ahora.”
“Por respeto a mi enfoque, prefiero no aceptar colaboraciones externas en este momento, pero te deseo éxito con tu proyecto.”

c) Aprende a delegar o derivar

No siempre es “no”. A veces es “no directamente yo, pero puedo recomendar a alguien” o “ahora no, pero más adelante”. Eso mantiene puertas abiertas sin comprometerte.

d) Cuida tu postura digital

  • No desaparezcas brutalmente: si debes retirarte de una conversación o proyecto, hazlo con una despedida respetuosa.
  • No caigas en agresiones pasivas (resentimientos ocultos, respuestas frías sin explicación).
  • Sé coherente: si tus límites son públicos (horarios, servicios, políticas), aplícalos con firmeza.

e) Reflexiona sobre tus propias emociones

Ese “mandar a la mierda” educativo te va a incomodar al principio. Pero esa incomodidad es una señal de que estás empoderándote. La práctica hace que tu voz firme no suene hostil, sino respetuosa.


4. Un ejemplo adaptado al mundo digital

Imaginemos a Javier, creador de cursos online:

  • Le llegan muchas solicitudes de colaborar gratis con influencers pequeños.
  • Javier siente que aceptar todo lo dejará sin tiempo para su curso principal.
  • Decide fijar una política clara en su sitio: “No hago colaboraciones gratuitas”.
  • Ante un mensaje que le propone una colaboración gratis, responde:

“Gracias por tu propuesta. En este momento priorizo proyectos pagados que aporten alineación con mi misión. Te deseo éxito con tu iniciativa.”

Resultado: Javier respeta su rumbo, conserva tiempo para lo que importa, y no descarga culpa ni se desgasta.

5. ¿Por qué esta estrategia es un pilar de crecimiento?

5. ¿Por qué esta estrategia es un pilar de crecimiento?

  • Porque aprender a decir “no” bien te permite enfocarte en lo que genera impacto.
  • Protege tu energía mental: menos desgaste, más calidad en lo que haces.
  • Construye autoridad: cuando tu audiencia ve que tienes valores, límites y coherencia, te respetan más.
  • Mejora relaciones: los límites claros reducen malentendidos, expectativas falsas y resentimientos.

✅ Conclusión

Mandar a la mierda no tiene que ser rudo ni grosero. En el mundo digital, ser firme y respetuoso puede marcar la diferencia entre un negocio que se dispersa y uno que crece con enfoque. Adaptar esta filosofía de decir “hasta aquí, pero con dignidad” es esencial en la era de la hiperconectividad.